CUBA EN CARRERA CONTRA EL TIEMPO ANTE RETO DE ENVEJECIMIENTO
Por Roberto Hernández (Prensa Latina)
La Habana.- Cuba, cuya población se encuentra entre las más longevas del mundo, inició una carrera contra el tiempo para enfrentar el reto de la contracción en el número de trabajadores en poco más de una década.
Tras la presentación de un anteproyecto de ley de seguridad social, la isla entrará en un proceso de debates en los centros de trabajo que debe concluir con la aprobación en diciembre próximo en el Parlamento de la norma que amplía la edad de jubilación.
El documento presentado ante la Asamblea Nacional del Poder Popular por el ministro de Trabajo y Seguridad Social, Alfredo Morales, será sometido a la consideración de más de tres millones de trabajadores.
Entre las modificaciones propuestas está el incremento en cinco años de la edad de jubilación y del tiempo de servicios para acogerse a ella. De esta manera, las mujeres se jubilarán a los 60 y los hombres a los 65 y el tiempo de servicio exigido será de 30.
Estos cambios se introducirán paulatinamente en un período de siete años, a partir de 2009.
El texto otorga además otros beneficios como el cambio en el cálculo de las pensiones, lo cual significará un aumento de esos pagos, y cuantías adicionales por cada año trabajado por encima de los 30 propuestos.
La nueva ley incluirá a los trabajadores por cuenta propia y permitirá la conservación de las pensiones y el disfrute de salario completo a los jubilados que se reincorporen a un puesto de labor.
Morales subrayó que las modificaciones propuestas demuestran que el envejecimiento poblacional puede enfrentarse con medidas racionales, justas y humanas.
Los cubanos continuarán disfrutando de la seguridad social para el bienestar de todos, la que debemos preservar, defender y perfeccionar continuamente como una conquista del socialismo a la que jamás renunciaremos, subrayó.
De mantenerse la actual ley de seguridad social, vigente desde 1980, en 2020 serán menos los cubanos que arriben a la edad laboral que a la de jubilación, señaló Morales al citar informes de la Oficina Nacional de Estadísticas.
Será un proceso que se aplicará poco a poco, afirmó el dirigente tras señalar que “no serán medidas al tremendismo neoliberal”.
Ante esa situación, añadió, la dirección del país estudia un conjunto de medidas que estimulen la natalidad, además de otras en el terreno laboral y de la seguridad social.
El ministro aseguró que es una necesidad ineludible para la nación la elevación de la productividad del trabajo.
Si en 1970 había 7,1 trabajadores por cada pensionado, el año pasado esta relación se redujo a 3,1 y en 17 años será de 2,3, expuso.
En el proceso de envejecimiento de la población cubana ha sido determinante la política social de la Revolución, sin disminuir la significación de otras causales que limitan el crecimiento de la población, expuso.
Cuba cerró 2007 con una esperanza de vida de 77,97 años para ambos sexos: 76 para los hombres y 80,02 para las mujeres.
La marcada disminución de la natalidad es otra de las condiciones del envejecimiento iniciado en la isla 1978 con la caída de las tasas de fecundidad (cantidad de hijos) y de reproducción (cantidad de hembras) hasta llegar hoy 1,43 y 0,69, respectivamente.
Desde el punto de vista demográfico para que se garantice el crecimiento poblacional, el legado de cada mujer debe ser como mínimo de 2,1 hijos, y de ellos una niña.
Los cambios propuestos en la edad de jubilación se corresponden con la realidad de un país donde la esperanza de vida es cada vez más alta y la natalidad se mantiene en cifras muy bajas, explicó el presidente Raúl Castro en la más reciente sesión legislativa.
Estos, continuó, son “fenómenos típicos de países desarrollados, lo único que en nuestro caso es en un país subdesarrollado y tiene sus propias características”.
La Habana.- Cuba, cuya población se encuentra entre las más longevas del mundo, inició una carrera contra el tiempo para enfrentar el reto de la contracción en el número de trabajadores en poco más de una década.
Tras la presentación de un anteproyecto de ley de seguridad social, la isla entrará en un proceso de debates en los centros de trabajo que debe concluir con la aprobación en diciembre próximo en el Parlamento de la norma que amplía la edad de jubilación.
El documento presentado ante la Asamblea Nacional del Poder Popular por el ministro de Trabajo y Seguridad Social, Alfredo Morales, será sometido a la consideración de más de tres millones de trabajadores.
Entre las modificaciones propuestas está el incremento en cinco años de la edad de jubilación y del tiempo de servicios para acogerse a ella. De esta manera, las mujeres se jubilarán a los 60 y los hombres a los 65 y el tiempo de servicio exigido será de 30.
Estos cambios se introducirán paulatinamente en un período de siete años, a partir de 2009.
El texto otorga además otros beneficios como el cambio en el cálculo de las pensiones, lo cual significará un aumento de esos pagos, y cuantías adicionales por cada año trabajado por encima de los 30 propuestos.
La nueva ley incluirá a los trabajadores por cuenta propia y permitirá la conservación de las pensiones y el disfrute de salario completo a los jubilados que se reincorporen a un puesto de labor.
Morales subrayó que las modificaciones propuestas demuestran que el envejecimiento poblacional puede enfrentarse con medidas racionales, justas y humanas.
Los cubanos continuarán disfrutando de la seguridad social para el bienestar de todos, la que debemos preservar, defender y perfeccionar continuamente como una conquista del socialismo a la que jamás renunciaremos, subrayó.
De mantenerse la actual ley de seguridad social, vigente desde 1980, en 2020 serán menos los cubanos que arriben a la edad laboral que a la de jubilación, señaló Morales al citar informes de la Oficina Nacional de Estadísticas.
Será un proceso que se aplicará poco a poco, afirmó el dirigente tras señalar que “no serán medidas al tremendismo neoliberal”.
Ante esa situación, añadió, la dirección del país estudia un conjunto de medidas que estimulen la natalidad, además de otras en el terreno laboral y de la seguridad social.
El ministro aseguró que es una necesidad ineludible para la nación la elevación de la productividad del trabajo.
Si en 1970 había 7,1 trabajadores por cada pensionado, el año pasado esta relación se redujo a 3,1 y en 17 años será de 2,3, expuso.
En el proceso de envejecimiento de la población cubana ha sido determinante la política social de la Revolución, sin disminuir la significación de otras causales que limitan el crecimiento de la población, expuso.
Cuba cerró 2007 con una esperanza de vida de 77,97 años para ambos sexos: 76 para los hombres y 80,02 para las mujeres.
La marcada disminución de la natalidad es otra de las condiciones del envejecimiento iniciado en la isla 1978 con la caída de las tasas de fecundidad (cantidad de hijos) y de reproducción (cantidad de hembras) hasta llegar hoy 1,43 y 0,69, respectivamente.
Desde el punto de vista demográfico para que se garantice el crecimiento poblacional, el legado de cada mujer debe ser como mínimo de 2,1 hijos, y de ellos una niña.
Los cambios propuestos en la edad de jubilación se corresponden con la realidad de un país donde la esperanza de vida es cada vez más alta y la natalidad se mantiene en cifras muy bajas, explicó el presidente Raúl Castro en la más reciente sesión legislativa.
Estos, continuó, son “fenómenos típicos de países desarrollados, lo único que en nuestro caso es en un país subdesarrollado y tiene sus propias características”.
0 comentarios:
Publicar un comentario